Ficha de Lexie Amelia Brooks

Lexie se crió con su abuela hasta los 17 cuando murió y tuvo que vivir por su cuenta. Termino la secundaria y no pudo seguir los estudios universitarios ya que necesitaba un trabajo para poder mantenerse a si misma y poder pagar los impuestos de la casa de su abuela. A los 19 vendió la casa porque no tenía como pagar tantos gastos y con el dinero se compro un pequeño y lindo departamento en la ciudad. Pese a todo eso y de no tener a nadie que la cuidara, ni amigos al ser un poco antisocial y no tener tiempo para salir. En las noches se dedicaba unas horas a practicar hechicería de los libros que su abuela le había dejado. Estos libros habían pasado por generaciones y generaciones por lo que se notaba su antigüedad y los cuidaba como sus bienes mas preciados. Pese a todo esto siguió teniendo una vida normal trabajando de camarera en una cafetería de la zona.

Lexie es una chica un tanto callada, a veces demasiado, pero con los años aprendió a hacerse respetar y no le permite a nadie que la pisotee o le levante la voz sin una buena justificación.
Es una chica respetuosa hacia los demás y humilde. No se permite comprarse lujos ni ir a lugares caros.
En su tiempo libre se pasa practicando hechicería y leyendo.
No le gusta comer pescado ni nada que salga del mar, el olor le repugna.
En el amor es una chica con paciencia. Nunca tuvo a nadie importante en su vida. Tampoco se enamoro ni se fijo en alguien por mucho tiempo. Al gustarle las mujeres no habla del tema con muchas personas, ya que no sabe quienes pueden mirarla diferente. Prefiere guardarse ese tema para ella.
Le gustan las cosas serias, pero relajadas. No le va el rollo de vivir una vida seria, pero tampoco le gusta vivir en una fiesta cuando no tiene tiempo para eso.
No es buena contando chistes, pero le encanta usar el sarcasmo con personas que lo entienden. Si puede ayudar a los demás lo va a hacer. Es un tanto terca a veces pero siempre tiene una sonrisa si la otra persona se la merece. Otro de sus pasatiempos para quitarse el estrés del día es cocinar. Desde cosas dulces a cosas saladas y a veces lleva algunas cosas a la cafetería para venderlas ya que a los clientes les encantan.

Tampoco le gusta usar los hechizos para aprovecharse de la gente, desde pequeña supo ganarse las cosas a pulso y pasiencia.